e-galeradas

He querido dejar aparte la intervención de Gemma Ferreres porque me parece –tanto por contenidos como por estilo- muy distinta de las de sus compañeros de mesa.

La autora de Tintachina, sin duda uno de los blogs de referencia en la blogosfera hispana, decidió en el 2005 dejar ‘ese estado mental que es tener un blog’ por la misma razón que un día de febrero de 2001 decidió comenzarlo: porque sí. Por el camino había tenido tiempo de organizar la I Encuesta y la II Encuesta a Webloggers y lectores de Blogs, y de impulsar el wiki colectivo sobre la historia de los weblogs en España.

Afortunadamente, todavía podemos seguirla de tanto en cuanto desde eCuaderno.

La propia Gemma nos instó a completar su intervención en nuestros respectivos blogs desde casa. También ella lo ha hecho. Y además nos deja para facilitar la tarea sus propios apuntes y hasta la presentación que ella misma utilizó.

Sin duda, lo más interesante de su intervención –a mi parecer- fue la comparación que estableció entre las noticias que publica el periodista y las que puede publicar un blogger: el periodista tiene mayores posibilidades de acceso a la información que el blogger, puede cubrir mayor cantidad de acontecimientos relevantes y dar cuenta de muchas más noticias; pero cuando un blogger se entera de dónde hay noticia y decide acercarse hasta el lugar de los hechos o a la celebración de cualquier evento, suele hacerlo con mayor eficacia por una simple razón: porque está allí por gusto, porque le apasiona el tema y porque –seguramente- lo conoce bien. Es más, si queda defraudado, directamente puede irse de allí sin dar ninguna explicación a nadie y no tendrá que redactar por obligación ninguna crónica.

Coincido –creo que Gemma pensará igual- que la información de un blogger tiene la garantía de la pasión depositada en un trabajo hecho por gusto. Para mi, al menos, es una salvaguardia importante. También, habría que aclarar, siempre y cuando el blogger tenga una educación y unas aptitudes mínimas, por supuesto. Pero igual que los periodistas.

Y después me pareció fundamental la conclusión final: Juan Varela en otras jornadas se declaró ferviente defensor del fin de la era de la inocencia en la blogosfera. En esa misma línea interpreté la aportación de Gemma en estas otras. La blogosfera está adquiriendo demasiados vicios y los medios tradicionales, en cambio, ya han reaccionado.

Todo es autoreferencia y ‘ombliguismo’ en los blogs, la economía de la atención cada vez exige mayores esfuerzos para descubrir un nuevo talento, nadie tiene tiempo de descubrir a nadie. ¿No es acaso eso una de las grandes críticas que tradicionalmente se le han hecho a los medios de comunicación de masas?

En cambio, para los viejos medios, la blogosfera es el jardín secreto, un lugar plagado de fuentes informativas que sólo hay que filtrar. Es su negocio, el mismo de siempre, determinar qué es noticia y qué no lo es; aportar la dosis necesaria de credibilidad a la información; ser de nuevo, meros intermediarios entre lo que acontece y el gran público.

@ 10:03 a. m.