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sábado, agosto 5

 

‘Este verano tengo una becaria en el blog’

El teléfono supuso una revolución en las comunicaciones. Hoy esa revolución se llama blogosfera y supone la posibilidad de participar en una conversación mundialLeyendo bibliografía me he encontrado con que los autores no se ponen de acuerdo a la hora de definir lo que es un weblog. Unos destacan unas características, y otros otras particularidades distintas. En general creo que es un espacio de libertad (casi) absoluta –los derechos y libertades de uno terminan donde empiezan los de los demás- para publicar en Internet lo que a su autor le venga en gana (que como dice José Luis Orihuela es también la razón más poderosa para hacer las cosas: ‘porque sí, porque me da la gana’). Por eso, estoy muy de acuerdo con Antonio Cambronero cuando dice: ‘puedo afirmar sin temor a equivocarme que existen tantas definiciones del término como escritores de blogs’.

Es posible que me esté metiendo en un jardín, pero en cualquier caso tengo claro lo que NO es un weblog:

-
La página web personal de mi padre. Está hecha, eso sí, con mucho cariño y dedicación, cuando publicar en Internet era sólo para atrevidos artesanos, digitalmente diestros y muy pacientes. Pero precisamente por eso no es un blog, porque no todos la podrían –podríamos- hacer. El blog tiene que ser un sitio web fácil de crear y mucho más fácil de actualizar.

-
Un sitio web que no enlaza con otros. Porque entonces no participa de la conversación. Antonio Fumero lo tiene claro, ‘el único mecanismo estrictamente necesario para la existencia de conversaciones en la blogosfera es el enlace hipertextual’. Contra lo que pueda parecer en principio, la conversación no se hace a través de los comentarios dentro de cada blog, eso sería como hablarnos en voz baja al oído; es una conversación distribuída, a gritos, desde y entre cada blog que hay en la blogosfera.

- Menos aún
esto, que peca del mismo error y encima pretende hacernos pasar por tontos. Esto es simplemente una columna de opinión que en vez de adoptar la forma de átomos como antes adopta la forma de bits. Al menos, no matan árboles...

- Tampoco es un blog
un sitio web que no admita comentarios –me gusta Microsiervos, pero han llegado a otro nivel, ni mejor ni peor, distinto-, porque eso también limita mucho la conversación ya que priva de voz a la gente que lee blogs pero que no escriben uno.

- Un
foro. Porque no existe el criterio editorial de una persona o personas, que oriente la conversación y proponga temas, que asuma la autoridad. El foro es responsabilidad distribuída de toda la comunidad que participa, sin ningún otro compromiso. El (buen) blogger mantiene un compromiso tácito con sus interactores.

- Un
agregador automatizado de contenidos. Porque tampoco hay un autor -una persona- detrás.

- Y tampoco es un blog, por supuesto, la publicación en Internet con formato de weblog que tiene un becario. Porque implica una intermediación editorial. El blog es un medio personal, cuya máxima virtud, precisamente, es la eliminación de esa necesidad a la hora de poder publicar, un medio que ha colado una
imprenta, una emisora de radio y una cadena de televisión en cada una de nuestras casas. Un medio que ha puesto en jaque a los tradicionales intermediarios de la información. Los mismos que ahora están preocupados. Es más fácil que todo eso: cualquier becario debería publicar simplemente su propio blog.

Y también tengo claro a lo que debe parecerse un blog:

Foto del Café Noir de París (Vía:Flickr, Phil H)- A un
altavoz. Porque es un medio para gritar a todo el mundo.
- A una
fotocopiadora. Porque las proclamas, consignas y pasquines se quedan escritas. Por si alguien no oyó el grito...
- A los
palos y piedras de los campesinos revolucionarios, a la máscara del Zorro, a las hojas de reclamaciones... Porque deben ser como los watchdogs o perros guardianes, porque tienen que convertirse en un sitio de denuncia, un arma contra los abusos o las injusticias.
- A una
carta a los Reyes Magos. Porque son herramientas colaborativas que pueden facilitarnos mucho trabajo.
- A un
bar. Porque son conversación, tertulia de amigos, charla entre iguales.
- A un café. Porque son
igual o más adictivos.
- Y a una buena
cerveza fría. Porque el blog –como la cerveza- sirve para generar comunidad y hasta afianzar lazos personales.

Lo otro, lo del sitio web personal en el que los contenidos se agrupan en entradas que se ordenan de manera cronológica inversa, etc, etc, etc... Creo que es lo de menos.

Por supuesto, se aceptan críticas o sugerencias.


Comentarios enviados:
Vaya, ahora no sé si tengo un blog o qué es lo que es esto... Me lo seguiré preguntando mientras voy escribiendo.


 



Haces bien, umla, ¿y qué más da lo que sea esto? El caso es que tú disfrutas haciéndolo y a mi -y a otra gente- nos gusta leer lo que escribes. Por eso yo creo que tu blog se parece mucho a un altavoz. Además tú eres de las que gritan desde dentro...
Insisto, existen tantas definiciones de blogs como personas que los escriben! Lo mejor de todo es que lo hacemos porque podemos (por fin Internet es de la gente y no de unos pocos iniciados) y porque nos da la gana, porque queremos.
Nos seguimos leyendo...


 



Gracias por tus ánimos, Sergio. A veces me desespero pensando que nadie lee lo que escribo; y otras veces, precisamente el saber que casi nadie lo lee es lo que me da fuerzas para escribir ciertas cosas, sin complejos y sin rendirle cuentas a nadie.

Para los que por obligación tenemos que escribir otras cosas y en otro tono, los blogs son sobre todo un "desahogo". Supongo que podría decir que esa es mi definición. ¡Esperaba ver otras! Cómo se nota que la gente está de vacaciones...

Saludos.


 



Sí, precisamente por eso, porque estamos algunos de pseudo-vacaciones, he caído en la desgracia de no haber leído este post hasta ahora. Sergio, estoy totalmente de acuerdo contigo, me encanta como lo has escrito -tan didácticamente y usando tan buenos ejemplos como si fuesen las fuentes de una noticia- y vamos, que si hay una buena definición de lo que es un blog, en mi opinión, es la que se describe en este post. Seguro que harás bien tu labor evangelizadora en la fe blogueril (jejeje:P)Mucha suerte en Argentina y-ah!-, espero repetírtelo pronto en persona!


 



Es un halago, Pau, viniendo de quién viene. Nos vemos


 



Muy de acuerdo contigo Sergio, es más fácil definir lo que no es un weblog que lo que sí es. Me permito hacer autobombo para recomendarte un (aburrido) artículo recopilatorio sobre definiciones de blog: "Una mirada atrás: rasgos y reflexiones para decidir qué es un weblog" http://www.cibersociedad.net/congres2004/grups/fitxacom_publica2.php?idioma=es&id=344&grup=43

Desde luego me gusta más tu analogía en forma de bares, altavoces, gritos... A ver si hacemos un Beers o un "Horchata´s", que parece mentira que estemos en la misma ciudad, carajo. Por cierto, yo me voy a la tuya a trabajar ;)

Un abrazo


 



Está de lujo el artículo, JM, me lo llevo como bibliografía para el trabajo de investigación. Además, he aprovechado para sacar alguna cosa más de la página del Observatorio. Imagino de todas formas que la analogía no cabía en un texto tan académico, así que cada cosa en su sitio.
Y bueno... dame pistas... te vienes a ¿Murcia? ¿Elche? ¿Valencia? Pfff... ya no sé ni cuál es mi ciudad... ¿Aquello que hablamos un día por teléfono?


 



Exacto, lo que hablamos por teléfono... pijo, ;)


 



He llegado a tu blog desde 'eCuaderno' (un hallazgo casual, lo más interesante de los blogs). No sólo me gusta practicar el 'blogging', sino también leer con atención opiniones autorizadas, como la tuya.

Saludos


 



Tienes toda la razón, Joaquín. Creo que ir saltando de blog en blog y de repente descubrir uno que te guste es como perderte en una ciudad desconocida e ir topando con rincones sorprendentes que no están en ninguna guía. Esa ciudad, por cierto, podría ser Sevilla. :)
Un saludo y, por supuesto, serás bienvenido si deseas volver


 



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